TRANSFORMACIÓN II

METAMORFOSIS

Es necesario, recalcar, que dentro de lo más sublime de la instrucción Bíblica, es que cada lección debe ser una experiencia real en nuestra vida por medio de una metamorfosis, o un proceso gradual de transformación de nuestra vieja naturaleza y dar paso a una nueva naturaleza, a la naturaleza del Señor Jesucristo. Si esto no es parte de nuestra vida, entonces el conocimiento adquirido, solo será “algo teórico” y no habrá cambios transcendentales en nuestra vida.

La cantidad de conocimiento adquirido, e incluso, la manifestación de los dones en un cristiano no son una señal definitiva de crecimiento o madurez espiritual, aunque en algunos casos, sí lo es.

“Muchos (dice “muchos”, no “algunos” ó “pocos”) me dirán en aquel día “Señor, Señor, ¿no profetizamos en tu nombre, y en tu nombre lanzamos demonios, y en tu nombre hicimos muchos milagros? Entonces les protestaré, nunca os conocí apartáos de mi, obradores de maldad”. Mateo 7: 20-23

No cometamos el error de vivir engañados.... El crecimiento espiritual que agrada a Dios se manifiesta a través de una vida transformada*, fundada en cambios continuos y radicales en la manera de ser, pensar, hablar, actuar, etc., y no basada solo en el conocimiento; en los dones, habilidades, talentos, capacidades y ministerios.

El hombre sin duda, fue afectado por el pecado, y su original naturaleza se corrompió y se ensució, y fue así que se adquirieron las Obras de la Carne descritas en Gálatas 5:19-21; ellas son: Adulterio, fornicación, inmundicia, odio, disgusto, una conducta áspera, actitudes negativas, un lenguaje obsceno, etc.

EL Plan de Dios, es que esas Obras de la Carne o de la Vieja Naturaleza pasen por un Proceso de Metamorfosis, o Transformación; y así crecer en la gloria y semejanza de Jesucristo. Entonces.... Dios prepara cada día situaciones, circunstancias, lugares y personas que se han de cruzar en nuestro diario caminar, y trayendo experiencias de placer y en otros casos, de dolor en situaciones favorables como desfavorables, a favor o en contra. Todo esto tiene como finalidad el mostrarnos si tenemos un buen nivel de la metamorfosis ó transformación de nuestra pecaminosa naturaleza.

Pero, ¿Cómo reaccionaremos, o cuál es nuestra actitud cuando nos hallamos en diversas pruebas?, ¿Manifestamos la naturaleza de Jesucristo al “dar gracias por todo” o al manifestar “sumo gozo” en medio de esas pruebas, o manifestamos una condición de amargura, molestia, incomodidad, enojo y depresión?.

1 Tesalonicenses 5:18 “Dad gracias en todo….”

Santiago 1:2 “…tened por sumo gozo cuando cayereis en diversas tentaciones.”

La meta final de Dios para la vida del cristiano no solo es la salvación de la condenación, también es llevarlo a la perfección y madurez espiritual en donde manifieste siempre la naturaleza de Jesucristo: Su humildad, santidad, bondad, gozo, amor, amabilidad, justicia, misericordia, etc. Al crecer el creyente, abandona sus infantiles actitudes, reacciones y expresiones características de los niños en Cristo. Dios no dijo: “ Crece si quieres crecer”, “Crece si es conveniente a tus intereses”, “Crece si eres especialmente ambicioso”. ¡Dios nos ordena crecer!.

“Antes siguiendo la verdad en amor, crezcamos en todas las cosas en aquel que es la cabeza, a saber, Cristo”. Efesios 4: 15

Crezcamos

Griego: Auxano 837

Significa: Agrandar, ser aumentado, acrecentar, extenderse, ser transformado o cambiado de naturaleza.

La Metamorfosis de la Mariposa en la vida natural, es la figura ideal de la metamorfosis o transformación espiritual que debe efectuarse en la vida de todo cristiano. Veamos brevemente acerca de este misterioso y milagroso tema.

HUEVECILLO O SEMILLA.

“Mi embrión vieron tus ojos, y en tu libro estaban escritas todas aquellas cosas que luego fueron formadas”. Salmo 139: 16

Este es el inicio de la vida de una mariposa, este es también el inicio del ser humano, todo empieza en una condición de un pequeño huevo o embrión, o una semilla o célula procreativa. La célula viva es un enorme, sorprendente y misterioso complejo de información, las instrucciones que se hallan en el ADN de la célula humana, si se describieran, llenarían unos 1000 libros de 600 páginas cada uno. Cada célula viva es un mundo atestado de hasta doscientos grupitos de átomos, llamados moléculas, y dentro de esa célula, se halla establecido todo lo relacionado a las características personales de un ser humano que bien pudiera ser concebido. Todo ello se halla en el código genético o ADN.

Nuestro principio espiritual en la eternidad atrás, fue tan solo en forma de un embrión, o una semilla poseyendo un alma, un espíritu y una voluntad.

Efesios 1: 4 Ezequiel 28: 14

Las piedras de fuego de Ezequiel 28:14 eran los embriones de esta presente humanidad (alma, espíritu y una libre voluntad). Ahí no poseíamos un cuerpo físico, sino un cuerpo espiritual; más tarde todos estos embriones de vida o células procreativas fueron puestas en los lomos procreativos de Adám y aunque no lleguemos a entenderlo plenamente, todos ahí pecamos.

Al adquirir un cuerpo físico al ser concebidos por nuestros padres, fuimos engendrados con una condición pecaminosa.

Salmo 51:5 “He aquí, en maldad he sido formado, Y en pecado me concibió mi madre”.

Esta era nuestra condición aún cuando estábamos en los lomos procreativos de nuestros antepasados; como embriones o células, ya el pecado había corrompido nuestra naturaleza. Hasta el día en que Jesús vino a nacer en nuestro corazón, hasta ese momento se dio inicio a la metamorfosis ó transformación de nuestra vieja naturaleza, y posiblemente hoy estemos en la etapa de:

GUSANO.

“... Ni las estrellas son limpias delante de sus ojos: Cuánto menos el hombre que es un gusano...” Job 25: 5– 6

Quizás espiritualmente muchos están en esta etapa de gusano. La Biblia dice que el hombre es un gusano. Pero ¿qué es lo que nos hace vernos como gusanos?

La naturaleza pecaminosa es repulsiva a los ojos de Dios, repulsiva como la apariencia de un gusano. Incluso, los bebés muestran esta naturaleza de gusano a través de las rabietas y caprichos. Las malas actitudes y malas reacciones y expresiones que tenemos ante la adversidad, maltrato y aflicción; y también en tiempos de exaltación son una evidencia de esa naturaleza repulsiva; las contiendas, los chismes, amargura, celos, orgullo y jactancia y tantas otras cosas similares, son una manifestación de esa naturaleza repugnante de gusano que tenemos.

Con cuánta razón la Palabra de Dios dice que el hombre es un gusano!

Lo alentador de todo esto, es que Dios ordena crecer, que tengamos una transformación o metamorfosis de esa naturaleza. Dios no desea que el cristiano se quede en una condición de gusano.

Pero en este momento... es una buena ocasión para preguntarnos:

¿Estoy creciendo en la naturaleza del Señor Jesucristo? ¿Estoy trabajando cada día en este proceso de metamorfosis o transformación? ¿Estoy luchando y batallando para ser verdadero? ¿He mejorado en ser una mejor persona con lo que he oído? ¿Soy un instrumento de paz en medio de los conflictos y comentarios negativos? ¿Estoy manifestando una reacción y actitud más pacífica, suave y consoladora aún cuando atravieso por tribulaciones, problemas y otras adversidades?

¿Qué estoy haciendo con la enseñanza adquirida? Solo voy a expresar: “Qué bonita enseñanza” Pero ¿Qué voy a hacer durante los próximos días al enfrentar los remolinos y agitaciones de las situaciones difíciles?

¡Tenemos que trabajar de manera constante en el proceso de metamorfosis o transformación para manifestar la vida de Cristo en nosotros!

Crezcamos en ser cristianos reales, verdaderos, con peso, y quien marque la diferencia. No importa si tan solo hoy tuviéramos el crecimiento y la naturaleza de gusano, Dios desea que nuestras reacciones, actitudes, nuestra manera de pensar, hablar y actuar sean renovadas, hechas diferentes y sean cambiadas. Para ello tenemos que confesar y arrepentirnos de nuestros pecados, de todas aquellas obras de la carne que se manifiesten en cada ocasión y pedir a Dios cada día los tres poderosos recursos cambia vidas, o tres ingredientes de limpieza, a saber: La Sangre de Jesucristo, el Fuego del Espíritu Santo, y las Aguas del Nombre, Muerte y Vida de Jesús. Usémoslos!

El alto propósito espiritual nos genera ganancias eternas, es lo único que podremos sacar y llevar de esta vida. Esta debe ser nuestra máxima ilusión y motivación para vivir, por lo tanto nuestra existencia, nuestra vida no es un accidente sin sentido, ni tampoco estamos aquí solo para comer y beber y después morir. Estamos aquí para recobrar la imagen y semejanza de Dios en nuestra vida..... Y vivir cada vez más en niveles más altos de santidad y amor. Este es el verdadero sentido de nuestra existencia. Y todo esto se obtiene por medio del vivir diariamente prestándonos al proceso de transformación o metamorfosis.

Es verdad... Nuestra vida terrenal, nuestra profesión, ocupación, negocios, empresas, posesiones, y otras cosas que forman parte de un propósito natural; tienen su importancia, y sin embargo, lo único que tendrá valor más allá de la muerte, será lo que hayamos adquirido en nuestra vida espiritual.

Así que, no importa si sentimos el deseo de trabajar o no lo sentimos para buscar ser transformados… debemos hacerlo, y entonces El Señor añadirá de manera gradual Su naturaleza santa.

ETAPA DE CAPULLO

“... Somos transformados de gloria en gloria en la misma semejanza, como por el espíritu del Señor”. 2 Corintios 3:18

Transformados Griego: meta 3326

Significa: Renovar, hacer diferente, cambiar, ser convertido, transformar.

3445 Griego: morphos Significa: Forma, costumbre, modo, figura y naturaleza.

¿Cuáles son las enseñanzas en relación al capullo?

1.- NO POSEE UNA APARIENCIA HERMOSA.

Salmo 22:6 “Mas yo soy gusano, y no hombre; oprobio de los hombres, y desecho del pueblo.”

Por el hecho de ser cristianos, en diversos casos la gente nos menosprecia y nos considera de poco valor, nos consideran como algo sin valor y sin futuro. Sin honra; nos tratan con desdén, llegamos a ser el oprobio de los hombres (Salmo 22:6).

1 Corintios 1:28 “Y lo vil del mundo y lo menos preciado escogió Dios, y lo que no es, para deshacer lo que es.”

Al buscar crecer en la santidad, las gentes y aun algunos creyentes nos ven feos, sin atractivo, y dicen que somos exagerados y fanáticos. Al no seguirles la corriente o no participar con ellos en sus palabras torpes, picaras, de doble sentido, de crítica; y en sus costumbres y hábitos mundanos. Al no vestir para seguir las modas del mundo, entonces nos reprochan: “Eres un extremista, un fanático, estás perdiendo o desperdiciando lo mejor de tu vida”

2.- EL CAPULLO ES FEO Y SIN HERMOSURA.

Éxodo 26:14 “Harás también á la tienda (del Tabernáculo)…. una cubierta de cueros de tejones encima.

(Estas pieles eran ásperas, no mostraban una apariencia atractiva.

De igual manera, si la gente habla que somos feos porque no nos conducimos como los demás (claro, dentro de una conducta cristiana)…entonces estamos testificando que vivimos dedicados a que la metamorfosis se culmine, y a la vez tenemos el testimonio de que vivimos en la etapa de capullo; no debemos prestar los oídos para escuchar las voces de los extraños.

3.- EL GUSANO ESTÁ LIMITADO EN EL CAPULLO.

Lamentaciones 3:7 “Cercóme por todos lados, y no puedo salir..”

Cuando hemos dado un sí eterno al Señor, entonces nos lleva a la etapa de capullo y construye una cerca; la cerca o cubierta nada atractiva del capullo y en donde en su interior seguirá el milagroso proceso de metamorfosis o cambio de naturaleza. Hay algunos cristianos que ya traían una cerca desde la eternidad pasada, ellos son gente predestinada… Traen una cerca. Ellos vienen marcados y señalados.

Romanos 8:29 “Porque á los que antes conoció, también predestinó para que fuesen hechos conformes á la imagen de su Hijo…”

Sin embargo, aun ellos, hoy tienen la oportunidad de corroborar sus elecciones. Hoy muchos cristianos (?) expresan: No me pongan límites… No me digan lo que debo o no debo hacer…!!

Así que aquí en el capullo, el gusano está limitado a una sola posición, a un solo lugar; está sujeto y fijo. Se van diluyendo sus pensamientos golondrinos. Se fija, se establece y se limita cada vez más al Plan Maestro de Dios, no sigue sus propios pensamientos, ideas y conceptos.

4.- EL GUSANO ACEPTA ESTA ETAPA DE SOLEDAD.

Salmo 102:6-7 “Soy semejante al pelícano del desierto; Soy como el buho de las soledades. Velo, y soy Como el pájaro solitario sobre el tejado”

Nadie más cabe en el capullo; el espacio es solo para él. De modo, que el gusano no llora y dice: “Es que me siento solo (a), nadie me quiere acompañar, es que nadie busca la separación y santidad”.

El gusano hace una elección personal al entrar al capullo o tejerse y encerrarse en su capullo. El gusano tiene una visión personal y decide por sí mismo.

Dentro del capullo no hay una visión externa hermosa o agradable… se alimenta de su propia visión personal… La de ser convertido en una hermosa mariposa… en ver la culminación del Plan Maestro de Dios.

Ya no vive para ver los espejismos y destellos de las cosas de esta vida (diversiones, posesiones, posiciones, placeres, gentes, etc.)

No vive dentro del capullo solo viendo “diablos y enemigos naturales” a cada momento, mantiene su visión en la fidelidad de Dios para culminar su obra!!

5.- NADIE SABE LO QUE PASA EN EL INTERIOR DEL CAPULLO.

1 Corintios 2:14 “El hombre animal o natural no percibe las cosas que son del Espíritu”

Hay creyentes en Cristo que al hablarles del mensaje del capullo, el mensaje de separación de lo mundano y carnal, expresan que no es para tanto… les es una locura… una bobería… una doctrina absurda; algo extremista; e ignorante… Pero el hombre de Dios comprende y entiende esa etapa de capullo que va a durar hasta el momento del rapto o arrebatamiento.

Sonará la trompeta… la voz del Amo, Dueño y Señor gritará “Pueblo mío… Pueblo mío… es la hora… sal del capullo y vuela… vuela a los aires”

Confesaremos: Valió la pena… sí, valió la pena entrar voluntariamente al capullo, valió la pena vivir una vida de separación para crecer en la santidad del Señor Jesucristo. Muchos se darán cuenta de su equivocación… pero demasiado tarde

En esta etapa de capullo, en gran parte, se lleva a cabo este proceso de transformación, de cambio de naturaleza. El pueblo de Israel estuvo en este capullo (en el desierto) por varios años. En esta etapa el gusano sufre consecuencias adversas, de limitación, de privación y de separación. Es separado del mundo exterior, ahí el gusano no tiene a su alrededor un panorama hermoso, es limitado a un solo sitio. Vive en una condición de soledad personal, ahí el gusano está perdiendo o muriendo a su antigua imagen y apariencia.

Y si Dios llevó a Israel a este capullo, en el desierto, lo mismo hace con nosotros espiritualmente. En esta etapa, Dios nos lleva a tener una separación de las cosas, modas, costumbres y hábitos del mundo, y esto en nuestra manera de hablar, actuar, e incluso de la manera de cómo vestimos o adornamos nuestro cuerpo. Al responder al llamado de Dios para ser introducidos al capullo de separación, los demás, e incluso los hermanos en la fe, nos consideran ridículos, anticuados o fuera de moda.

Cantares 1:6 “No miréis en que soy morena, Porque el sol me miró. Los hijos de mi madre se airaron contra mí..”

Dios nos cerca, nos mete al capullo de separación y tal parece que ahora nadie se interesa por nosotros, nadie pregunta como estamos o como nos va; nadie nos llama por teléfono; etc. El nos coloca en una etapa en donde nadie se acerca a nosotros, nadie nos visita, incluso cuando estamos enfermos. Lo único que Dios persigue es que le veamos a Él como el que empezó la obra de transformación, y le veamos como Aquel que la va a terminar. Y entonces, ahí la transformación progresará, crecerá y se perfeccionará para estar listo a la última etapa de...

MARIPOSA (MONARCA)

“He aquí, os digo un misterio: todos ciertamente no dormiremos, mas todos seremos transformados (de acuerdo a su estatura espiritual)”. 1 Corintios 15: 51

“... Los muertos en Cristo resucitarán primero: luego nosotros, los que vivimos, los que quedamos, juntamente con ellos seremos arrebatados en las nubes (volaremos) a recibir al Señor en el aire...” 2 Tesalonicenses 4:17

En el tiempo exacto establecido por Dios para la culminación de la transformación de la mariposa... Entonces aquel repugnante gusano sale de su capullo, transformado en una hermosa mariposa.

De la misma manera, el cristiano, aquel que ha estado dispuesto a superar su condición de gusano y aceptar la cerca de separación del capullo... Extenderá sus alas y volará a las alturas en el momento del arrebatamiento para encontrarse con su Amo, Dueño y Señor, transformado en una Mariposa Monarca; claro, otros volarán como otra especie de mariposa, pero solo unos pocos como una mariposa monarca.

Sin embargo, cada uno será arrebatado según su crecimiento espiritual, según su madurez. Es verdad, los que sean levantados o raptados serán figurativamente como una mariposa. Pero observemos, no todas las mariposas son iguales de hermosas, y solo hay una especie que es conocida como la reina de las mariposas y ella es: La Mariposa Monarca.

Ellos lograron crecer en toda la estatura de Jesucristo, obtuvieron la perfección de Su naturaleza santa y humilde, ellos son llamados; la Esposa del Cordero, la Esposa espiritual de Jesucristo.

“Gocémonos y alegrémonos, y démosle gloria; porque son venidas las bodas del cordero, y su esposa se ha aparejado”.

Apocalipsis 19: 7

Pero.... La realidad es que, “muy pocos” cristianos tienen esta visión y disposición para ver culminado el proceso de Metamorfosis o Transformación. Por lo regular, existe resistencia y oposición en el ser interno del creyente y llegan a expresar: “A Dios lo que le agrada es lo que hay en el corazón, y no tanto lo de fuera, o el cómo me visto o me arreglo”.

Estas expresiones y otras similares, son evidencia de que se tiene una visión corta o inadecuada en relación a lo que significa la Metamorfosis espiritual, pues la Sagrada Escritura dice:

“Y el Dios de paz os santifique... en todo para que vuestro espíritu, y alma y cuerpo sea guardado entero sin reprensión para la venida de nuestro Señor Jesucristo”

1 Tesalonicenses 5:23

Entonces, ya sea que estemos en la etapa de gusano, o en la etapa de capullo, debemos prestarnos a ese Proceso de Metamorfosis.

Hoy... como cristianos poseemos una naturaleza dual o mixta; el Plan Maestro de Dios es que seamos depurados, limpiados y santificados, por lo tanto, día a día debemos prestarnos para trabajar en el proceso de Metamorfosis.

Cierto porcentaje de cristianos perderán el Rapto, no lograron adquirir alas para volar; otros serán arrebatados y extenderán sus alas para volar (figurativamente), pero no volarán como una Mariposa Monarca!. Ni siendo parte del reducido grupo de cristianos que serán llamados como La Esposa del Cordero, Jesucristo!

La meta final de la Metamorfosis, es adquirir la perfecta Estatura Espiritual de Jesucristo, el Monarca de monarcas. Entonces prestémonos voluntariamente cada día, para ir al Capullo de Separación, no pongamos más resistencia y oposición al cambio; separémonos para Dios, y crucifiquemos las Obras de la Carne.

¿GRILLO O GUSANO?

En la Carrera espiritual rumbo a formar parte de la Esposa de Jesucristo, rumbo a recobrar Su imagen y Su semejanza, o del crecer en una unión con Él... Nos es necesario obtener el debido entendimiento de lo que implica esa Carrera. Si no buscamos tener esto, entonces tarde o temprano estaríamos expuestos a tener épocas espirituales prolongadas de frustración, crisis y bancarrota.

“Por tanto, el pueblo sin entendimiento caerá” Oseas 4:14

Caerá Hebreo: “labat” 3832

Significa: Caer, tener un declive, disminuir, rendirse, dormirse, sucumbir, enflaquecer, desplomarse, retroceder, indisponerse, dividirse.

Estas experiencias podrían tenerse por épocas prolongadas en la vida cristiana si no se tiene la visión adecuada de lo que implica el proceso de transformación o crecimiento en relación a lo que es Jesucristo, y el precio a pagar por ello.

El cristiano, figurativamente es un gusano.... no un grillo.

“Ni las estrellas son limpias delante de Sus ojos ¿cuánto menos

el hombre que es un gusano, y el hijo del hombre, también gusano” Job 25:6

Un grillo aunque crece en tamaño, sin embargo no sufre o experimenta un proceso de transformación, o un proceso de cambio.... ¡¡Nace grillo y muere como grillo!!. Dios dice que el hombre es un gusano, el cual está sujeto a un proceso de cambio, o a una metamorfosis en cuanto a su naturaleza pecaminosa, a sus costumbres, hábitos, actitudes y expresiones. Pero... ¿Cuál es la naturaleza que tenemos como gusanos? En una condición aún pecadora.

GUSANO Hebreo: Rimmah 7415

Significa: Progenie, criar, exaltar, elevar, levantar, ascenso, sublevarse, promoverse.

Esta es parte de la naturaleza pecaminosa o carnal del hombre, busca aunque en muchos casos es inconsciente su propia exaltación, se promueve para ser conocido fuera de la Voluntad de Dios.

Además se eleva en arrogancia y orgullo en sus pensamientos y palabras; esto puede ser en un nivel bajo, mediano, o elevado. También se deprime, se enoja, se disgusta, se molesta, y se frustra al no lograr tener el control cuando sus planes y proyectos fracasan, o cuando las cosas no salen como planeó.

El Plan de Dios, es que obtengamos la naturaleza humilde del Señor Jesucristo, la naturaleza de sacrificio de Jesús el Hijo del hombre que menciona Job 25:6 y también representada como un gusano.

La palabra gusano a la que se refiere para el Hijo del hombre, es: Tolaath 8438

Significa: Gusano, oruga, larva, carmesí, escarlata.

Es una figura de la humildad y de sacrificio, pues el color carmesí, es el color de la sangre o de una vida sacrificada. Entonces debemos estar dispuestos a sufrir esa metamorfosis o transformación; que obtengamos la humilde, santa y limpia naturaleza de Jesucristo, y morir para nuestra arrogante y orgullosa naturaleza. ¡¡Qué importante es tener esta visión!! Así que, como gusanos, no seamos como...

LOS GUSANOS QUE SE SIENTEN BIEN EN SUS DELEITES Y DESEOS DE SU NATURALEZA CARNAL..

Hebreos 11:25

Nada sabio será si como cristianos viviéramos cómodos con los deleites, deseos, pasatiempos, pasiones, diversiones, costumbres y modas de esta vida.

Aquí es donde se genera resistencia y oposición al cambio, incluso el cristiano se resiste a la separación de sus fallas, y se justifica de diversas maneras; expresan que nadie es perfecto; sin embargo, no olvidemos.... ¡¡No somos grillos, somos gusanos en proceso de cambio!! Además...

UN GUSANO CON VISIÓN, SABE QUE SU META FINAL NO ES GRADUARSE COMO GUSANO. Efesios 4:13

El sabe que toda su existencia terrenal estará sometida a la metamorfosis, en oración buscará cada día obtener los cambios de su naturaleza a través de ir adelante del Señor Jesucristo para tener arrepentimiento y crucifixión o entrega de esas Obras de la Carne. Cada día trabajará espiritualmente para parecerse más al Esposo Celestial, el Señor Jesucristo!!! También....

UN GUSANO O CRISTIANO SABIO BUSCA ENTERARSE O DOCUMENTARSE DE COMO LOGRAR LA METAMORFOSIS.

Juan 5:39 Hechos 17:11

No basta solo saber que es necesario tener cambios en su vida, o en su manera de ser; además busca la debida información en el Manual del Fabricante, o en la Biblia. Un creyente que vive como grillo, se alimenta de la información de los programas de televisión, revistas, libros de entretenimiento, y pasatiempos; solo vive disfrutando el momento, no trabaja ni hace provisión para el futuro.

Esa es su vida... ¡¡y punto!! Solo vive para ser grillo ó ¿acaso... grillero? Qué importante es tener el buen hábito de escudriñar las Sagradas Escrituras. Dios será Fiel para iluminar aquellas verdades que Él desea mostrar con tal de señalar las imperfecciones y contaminaciones de la vieja naturaleza, o las Obras de la Carne.

Por otro lado, El desea mostrarnos las características del Esposo Jesucristo; Su humildad, suavidad, deleite, paciencia y otras virtudes que debemos adquirir en nuestra vida cristiana, pero...

DE QUE MANERA RECIBE INFORMACION EL CRISTIANO?

Es posible asistir a la iglesia, estar en todos los servicios, oír la Palabra de Dios, pero ¿Cuál es su actitud al oír o comer de la predicación de la Palabra? ¿Acaso con aburrimiento, fastidio, falta de interés y de mala gana?

Así no se logrará tener el efecto de la Palabra, tampoco traerá nuevos rayos de luz para mostrar la naturaleza de Cristo, y tampoco la nuestra.

Necesario es que al ir a buscar la instrucción, se tenga una buena actitud, un anhelo y deseo de que Dios muestre la verdad que El ha escogido para nosotros en ese momento, y entonces....

UN GUSANO CON VISION SABE RECURRIR AL LUGAR EXACTO PARA TENER LA METAMORFOSIS... Hechos 2:46 Hechos 5:42

Y ¿cuál es el lugar exacto para experimentar la metamorfosis? Ese lugar se llama: “El Capullo de Separación” es el Tabernáculo de Dios, el Señor Jesucristo, y tipificado en el Antiguo Testamento por el Tabernáculo de Moisés. Hebreos 9:11

Para introducirnos a ese capullo, lo lograremos por medio de la oración diaria de crucifixión de la vieja naturaleza. Es necesario entonces aprender a orar de acuerdo a este Modelo de Oración.

Solo en el interior del capullo encontramos la revelación de la imagen y la semejanza de Jesucristo, y solo ahí podremos adquirirla al trabajar en oración.

En este trabajo de oración debemos entregarle a Jesús las Obras de la Carne que se estén manifestando en nuestra vida cotidiana, entonces Él a cambio nos dará de Su naturaleza. No es de otra manera que podemos crecer de acuerdo a Jesús. La etapa vital y culminante de la metamorfosis, acontece en el interior del capullo de separación.

Recordemos: El gusano es separado o aislado del mundo exterior; ahí pierde su apariencia, además el gusano es limitado a una sola posición, a un solo sitio; está sujeto a la voluntad del Creador, el gusano ahí adquiere una cerca y solo él cabe en el capullo, pues es un sitio individual.

Nadie sabe ni puede ver lo que ahí acontece; sus hermanos gusanos cristianos dicen que es un anticuado y fuera de moda, un extremista, legalista y fanático. Pero tarde o temprano llegará el bello final, la preciosa culminación...

El capullo se romperá y surgirá una hermosa ¡Mariposa Monarca!.

No pongamos entonces, resistencia y oposición al cambio, separémonos para el Señor y crucifiquemos cada día las Obras de nuestra naturaleza carnal. Nunca olvidemos que ¡¡¡No somos grillos, somos gusanos en proceso de cambio, sin embargo... No vivamos toda la vida como gusanos!!!

NUEVOS NACIMIENTOS EN LA TRANSFORMACIÓN

El nacimiento de un niño puede pasar inadvertido para el mundo, después de todo, diariamente nacen miles de niños. Sin embargo para la madre y el padre el nacimiento de un niño siempre resulta ser un evento de gran trascendencia; genera un revuelo entre los miembros de la familia; estimula los sentimientos y emociones de toda la familia. Crea nuevos vínculos afectivos entre la familia. En fin, es un suceso milagroso y saludable.

En la vida natural, cada bebé es un milagro único e imposible de repetir. Los bebés nacen con ojos dispuestos a ver todo lo hermoso, abrazar todo lo alegre y amar sin condiciones.

APLICACIÓN ESPIRITUAL.

Respondió Jesús, y le dijo: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere otra vez, no puede ver el reino de Dios. Respondió Jesús: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de agua y de Espíritu, no puede entrar en el Reino de Dios. Juan 3:3-5

El Señor Jesús mencionó la necesidad de tener “un nuevo nacimiento” espiritual. Así como acontece en el ámbito físico natural, el nacimiento de un bebé crea, genera, y produce una serie de sucesos saludables y agradables en el cristiano, lo es de igual forma en el ámbito espiritual; generará nuevos tipos de vida y experiencias en su ser interno. Si no hay esos nacimientos espirituales por medio del proceso de transformación en oración, entonces: “…no puede ver el reino de Dios”

No Puede Griego: Dunamai 1410- 3756

Significa: No tener la capacidad; no ser posible; no tener el poder para; no tener el permiso de; no poseer la capacidad y la fuerza para; no llenar las condiciones..”

Ver Griego: Eido 1492

Significa: Entender; comprender; conocer; percibir; distinguir; contemplar; anhelar; admirar; respetar; experimentar; ocuparse de; tener una visión.

Por lo tanto, entre más nuevos nacimientos espirituales se tengan por medio del proceso de transformación por medio de la oración, entonces cada vez más se anhelará, se estimará, experimentará, y percibirá el reino o el mundo de Dios.

Además se crecerá en el ocuparse prioritariamente en todo aquello es de Dios. Se abrirán nuevos ojos espirituales, vendrá nueva luz para dar una poderosa visión en las cosas eternas; llevarán al entendimiento y comprensión de nuevas dimensiones espirituales en Dios. Se tendrá una visión más precisa en relación a la necesidad de progresar o crecer en la Estatura espiritual del Señor Jesús.

Además el Señor Jesús mencionó que sin este nuevo nacimiento: “..no puede entrar en el Reino de Dios”

Entrar Griego: Eiserjomai 1525

Significa: Penetrar; venir dentro; gustar cada vez más; aplicarse con vigor; ser estable; resuelto; determinado.

Entonces, cada vez más nos adentraremos con determinación, vigor y de manera inflexible en todo aquello que tiene que ver con el reino de Dios. Progresaremos en la penetración de las alturas y profundidades de la Palabra de Dios. De manera estable cultivaremos nuestra estrecha relación de amor con Jesús, el Esposo Celeste.

¡Qué importante es el hecho de buscar en el proceso de transformación esos nuevos nacimientos!. Una semilla en el ámbito natural requiere elementos básicos para germinar y nacer: La tierra con sus nutrientes; el calor del sol; y el agua.

Para un nacimiento espiritual se requieren tres elementos básicos: La Sangre del Señor Jesucristo; el Fuego del Espíritu Santo y las Aguas del nombre, Muerte y Vida de Jesús.. “..el que no naciere de agua y de Espíritu..” Y es claro, para que una persona pueda obtener la influencia y beneficios del agua y del Espíritu, es necesario que haya primero obtenido la Sangre del Señor Jesucristo como fundamento.

Primer elemento.... LA SANGRE DEL SEÑOR JESUCRISTO.

La cual debemos invocar a través de la oración de fe... todos los días); ella nos limpia de todo pecado confesado y arrepentido, y nos va transformando. 1 Juan 1:7 Como una experiencia inicial, adquirimos una porción de esta Sangre, cuando recibimos a Cristo como nuestro Salvador. Sin esta primera experiencia, el sacerdote no podía obtener la segunda, el Fuego.

Después de la aplicación de la sangre, el sacerdote colocaba sobre el Altar algunas piezas del animal. Entonces empezaba a manifestarse la Gloria de Jehová, salía fuego de delante de Jehová y consumía el holocausto. Versos 23 y 24 de Levítico 9

El segundo elemento básico, es el “FUEGO”.

El cual es un tipo del Fuego del Espíritu Santo; y el cual en oración, también podemos invocarlo para que consuma, purifique y transforme la naturaleza de nuestros pecados confesados y arrepentidos. Una porción de este Fuego y como una experiencia inicial, lo adquirimos cuando hemos recibido el Bautismo con el Espíritu Santo, pero que diariamente podemos invocarlo para buscar tener nuevos nacimientos en nuestro proceso de transformación o cambio de nuestra naturaleza pecaminosa.

El tercer elemento requerido es:

SE “LAVARAN” EN LAS AGUAS DEL LAVAR O LAVACRO.

Éxodo 40:31-32 Estas aguas, eran una figura de las Aguas del Nombre, Muerte, y Vida de Jesucristo. (Romanos 6:3-6)

Nosotros hoy, adquirimos un aspecto inicial de esta experiencia cuando hemos sido bautizados en Agua*

Estas tres experiencias en nuestra vida (Sangre; Fuego y Agua), las tuvimos como una experiencia inicial, pero a través de la oración, cada día debemos invocar Sangre; Fuego y Agua para obtener limpieza, santificación y transformación de nuestros pecados diarios, y así tener nuevos nacimientos espirituales. No existen otros elementos básicos que Dios halla provisto para nuestra transformación. Es verdad, también encontramos transformación por medio de la Palabra de Dios, pero Sangre; Fuego y Agua son los Elementos básicos.

Apóstol Pablo: “CADA DÍA MORÍA” 1 Corintios 15:31

Entonces: Cada día se producían nuevos nacimientos en su vida. El principio para tener nuevos nacimientos o una resurrección, es primero morir.

Tomemos dos ejemplos naturales: En el nacimiento de un pollito, si no se rompe el cascarón en el tiempo exacto, el pollito que está en el interior moriría sin haber nacido. Nuevas porciones de la Naturaleza de Cristo, son el pollito.

Debemos como el pollito, usar la “poca fuerza” que a veces tenemos, o a pesar de la incomodidad… romper todo tipo de resistencia y oposición con tal de que esos nuevos nacimientos se produzcan y no se frustren. El pollito se enfrenta a la adversidad, debe romper el cascarón endurecido, y estos representan todas las adversidades y luchas que se presentan para impedir que participemos del proceso de transformación en oración. El pollito, no dice: «voy a quedarme dentro de mi cascarón unos días más». ... Esas porciones deben “nacer” de acuerdo al tiempo y Plan del Señor, nosotros solo debemos prestarnos cada día en oración y estudio de la Palabra de Dios.

Además.. Debemos aprender de la lección de un becerrito recién nacido. Sale del interior de la madre con gran esfuerzo, entonces lucha para ponerse de pie, débil cae una y otra vez, pero persiste, persevera en su intento y por fin lo logra. Al paso de los días el animalito va sufriendo una serie de cambios o una transformación hasta adquirir la estampa de un animal adulto.

Acaso… no nos pasa igual? A pesar de que en ocasiones experimentamos una gran fuerza y determinación, sin embargo: Sin que lo sepamos, se producen esos “Nuevos Nacimientos” y experimentamos en algunas áreas de nuestra vida, cierto tipo de debilidad, poca fuerza, incomodidad, caemos vez tras vez, pero no es tiempo para desanimarse o rendirse, solo estamos teniendo la manifestación de que estamos obteniendo un nuevo nacimiento, el nacimiento de una nueva porción de la Naturaleza de Cristo.

Por así decirlo: Cada día debieran nacen nuevas porciones espirituales en nuestra vida espiritual. Esto, es sin importar el Nivel de Crecimiento Espiritual que tengamos. De continuo se producen “nuevos nacimientos”. Esta es una de las maneras como crecemos en Cristo. Y es a través de la crucifixión de nuestra carne, de la obtención de la Palabra, por medio del Espíritu (oración, alabanza, adoración y participación en la obra del Señor).

No nos desanimemos… No abracemos los pensamientos de desilusión… o de desesperación por causa de que en diversos tiempos o épocas sentimos debilidad, poca fuerza, incomodidad, y limitaciones. O que nuestras flaquezas o tiendas malvadas de odio, tinieblas y muerte se enseñoreen de nosotros…. Aquel que empezó la Buena Obra en nuestra vida la terminará si no desmayamos.

2 Corintios 12:9 Y él me dijo: Bástate mi gracia; porque mi poder en la flaqueza se perfecciona…

Al tener Nuevos Nacimientos… ¿Qué debiera manifestar el creyente?

De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es: las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas. 2 Corintios 5:17

Progresivamente irá manifestando “cambios continuos” en los diversos aspectos de su vida; en sus pensamientos, conceptos, argumentos, palabras y hechos. Sus reacciones y actitudes en medio de situaciones difíciles irán mostrando una transformación.

Debemos tener presente, que la transformación será progresiva; habrá nuevos nacimientos que llevarán cada vez más a la perfección en Cristo, habrá un progreso en la obtención de “cambios continuos”, pero nunca olvidemos que la obtención de la perfección de Jesucristo, es gradual. Pero sin duda, cada nuevo nacimiento espiritual en el corazón del creyente, generará un revuelo y alegría en el ser interno.

Crezcamos en una vida transformada, en una vida de nuevos nacimientos, de cambios radicales. Crezcamos en la naturaleza del Señor Jesucristo.